Entradas

Mostrando entradas de enero, 2014

Deseos inconfesables

Imagen
Su vida necesitaba tener una apariencia común, ya no tenía edad para seguir soltero y menos en aquel pueblo, donde cualquier anomalía social, producía un sin fin de especulaciones, y en general ninguna positiva. A sus treinta y cinco años tenía una situación acomodada, era cartero y  repartía el correo por las casas, algo que le proporcionaba información de todo cuanto pudiera acontecer a sus vecinos, además de  ocupar sólo la mitad del día, dejando el resto para atender con devoción Mariana  y de una manera altruista, todo  lo concerniente a la iglesia. Ella era una mujer algunos años mayor que él y nunca había tenido pretendiente, al menos conocido, ni incluso en sus años mozos cuando la belleza es lujuriosa aliada de la juventud. Sus treinta y siete años pesaban como más de cuarenta sobre ella, se sentía sola, con la única misión en su monótona vida del de cuidar a sus padres. Por eso cuando el hizo la más mínima pretensión de amor se agarró a ella con ...